Novedades Educativas  |  19.Ene.2022

¿Cuáles son las diferencias entre los Cardiodesfibriladores Implantables?

Los Cardiodesfibriladores no son todos iguales porque cada uno se adapta a las necesidades del organismo. En esta nota te contamos las diferencias entre ellos.


En Cardiolab nos interesamos en trabajar junto a la tecnología diseñada para mejorar la salud de los pacientes. Cuando las personas reciben la recomendación profesional de implantar un cardiodesfibrilador, suelen tener muchas inquietudes, miedos y algunos prejuicios que nos gustaría derribar.

Con esa intención, compartimos información útil para todo aquel que está buscando datos acerca de los cardiodesfibriladores, cómo funcionan, si el paciente puede continuar con sus actividades habituales, cuáles son los cuidados, etc.

¿Cuáles son las diferencias entre los Cardiodesfibriladores Implantables?

¿Qué es un cardiodesfibrilador?

Un desfibrilador externo es un equipo electrónico médico que se utiliza en las personas que están teniendo un paro cardiorespiratorio. Su función es, en primer lugar, dar un diagnóstico del paciente, indicando si está atravesando por una crisis en su sistema cardiológico y pulmonar. Esto significa que ese dispositivo es capaz de detectar si el corazón está teniendo latidos rápidos, llamados arritmias, los cuales son potencialmente mortales.

En segundo lugar, cuando se halla un ritmo cardíaco anormal, su tarea es ayudar a la corrección enviando una descarga eléctrica que hace que el músculo retome el ritmo que corresponde. Por fortuna, la divulgación científica respecto de este tipo de afecciones ha permitido que el público tome conciencia de la importancia que tienen los desfibriladores.

Los desfibriladores automáticos externos (DEA) se activan ante dos situaciones diferentes: fibrilación ventricular (implica que el corazón tiene una actividad eléctrica, pero no mecánica), o bien en caso de una taquicardia (cuando el bombeo sanguíneo es insuficiente). En ambas, el equipo actúa como corrector y reactivador de la frecuencia cardíaca normal.

Es por eso que hoy en día no es extraño encontrar a un DEA fuera de las instituciones de atención médica como edificios de administración pública, aeropuertos, empresas de turismo, hoteles y resorts.

¿Qué hace un Cardiodesfibrilador implantable?

Un desfibrilador cardioversor implantable (CDI), se coloca mediante un procedimiento quirúrgico en el interior de un paciente. Su trabajo es el mismo que mencionamos anteriormente: detecta, diagnostica y corrige una arritmia en el corazón. Es posible que también lo encuentres como DAI (desfibrilador automático implantable).

Si bien existen distintos tipos de cardiodesfibriladores, podemos mencionar algunas características que tienen en común.

Estas son las características de un CDI:

– Está compuesto por un generador de pulso (del tamaño de un reloj de bolsillo grande) el cual le permite hacer una lectura de la actividad eléctrica del corazón.

– La mayoría tiene un marcapasos incorporado capaz de enviar un impulso eléctrico para corregir los latidos, si detecta que van muy lento o a gran velocidad.

– Los CDI que no cuentan con marcapasos tienen otros componentes que cumplen la función de normalizar el ritmo cardíaco mediante una descarga eléctrica.

 

¿Cuál es la diferencia entre los CDI unicamerales y bicamerales?

A continuación te compartimos las diferencias entre los cardiodesfibriladores unicamerales y los bicamerales. El objetivo de estos equipos es ayudar a través de una descarga eléctrica al corazón a retorno el ritmo cardíaco normal.

Las descargas son de entre 1 o 2 electrodos intravenosos y la carcasa del generador actúa como polo activo. El cable electrodo tiene incorporado un electrodo capaz de realizar la descarga y actuar como desfibrilador ventricular. Este es un sistema simplificado similar a un marcapasos.

  • Unicamerales (VVIR): son los que estimulan un ventrículo o bien a una aurícula del corazón. Para cumplir esta función requiere conectar un solo electrodo en la cavidad a ser estimulada.

 

  • Bicamerales (VDD): estos dispositivos pueden estimular un ventrículo y una aurícula. Para esto, necesitan estar conectados a un electrodo en cada uno de ellos. También existen otros en los que se conecta un solo electrodo distal en el ventrículo y otro flotante en la aurícula derecha. Funciona censando a la aurícula y enviando un estímulo en el ventrículo; de esta manera se logra una sincronización entre la aurícula y el ventrículo.

Gracias a su intervención, el paciente se mantiene con vida sin correr riesgos adicionales devenidos de la falta de oxígeno, de la circulación sanguínea, etc. Cuando una persona está sufriendo un episodio y no recibe asistencia en los primeros 3 a 4 minutos, corre el riesgo de tener muerte súbita.

Sin asistencia, las posibilidades de recuperar al paciente sin signos vitales se reducen de entre un 7 a 10% por cada uno de los minutos transcurridos. Por esto es de gran importancia contar con un equipo de este tipo para poder actuar rápidamente, evitando daños mayores en el organismo de la persona afectada.

Algunos de los síntomas de ese tipo de arritmias son: mareos, vértigo, palidez, desmayo, dolor en el tórax, sudoración, dificultad para respirar y palpitaciones. De más está decir que recomendamos evitar el auto test y acudir a la consulta con profesionales de la salud para poder determinar si un paciente tiene arritmias o alguna afección cardíaca. Hacer una consulta puede prevenir problemas en tu salud y tratarlos a tiempo.

¿Cuáles son las diferencias entre los Cardiodesfibriladores?

El proceso quirúrgico para implantar un cardiodesfibrilador puede llevar entre 2 a 3 horas aproximadamente. El cirujano tiene que colocar un electrodo dentro de una vena y en el interior del corazón del paciente. Hecho esto, lo siguiente es la conexión de los electrodos al generador de pulso y al marcapasos.

Te presentamos dos cardiodesfibriladores diferentes:

Como todos los CDI de implante, el dispositivo usa un generador que transmite una descarga de energía para contrarrestar los casos de muerte súbita que ocurren por arritmias. Este dispositivo tiene una vida útil superior a los modelos anteriores.

Las ventajas que ofrece este equipo es que al dejar libre al órgano cardíaco se eliminan las posibilidades de sufrir daño vascular, al igual que disminuye el riesgo a tener infecciones diseminadas.

  • Cardiodesfibrilador Dynagen Mini ICD es el modelo más delgado y pequeño diseñado para este tipo de dispositivos. Su vida útil es la estándar, entre 5 a 7 años.
  • Cardiodesfibrilador Dynagen EL ICD es similar al anterior con la diferencia que tiene una longevidad superior que se extiende hasta los 11,7 años.

Tal como nos comentaba Gabriela Pestick, una paciente a quien se le colocó un Cardiodesfibrilador Dynagen de longevidad extendida: “Es un procedimiento sencillo. El postoperatorio no es doloroso. Es una solución que está al alcance de todos y, por suerte, tener un Cardiodesfibrilador te permite hacer una vida normal. El día a día es normal, no hay que tenerle miedo. Al contrario, es normal contar con un Cardiodesfibrilador, y lo bueno es que te permite tener vida”.

No dudes en comunicarte con nosotros para conocer más sobre los dispositivos disponibles y las posibilidades que ofrecen para mejorar la calidad de vida de los pacientes.